….. en el escusado

agosto 23, 2012

Hace tiempo que estoy preparando un libro y quiero invitarlos a participar. La idea es muy sencilla: se trata de un libro de divulgación científica que contiene temas variados y sin orden en particular con las siguientes 2 características:

– Cada capítulo (aún no se si al final les llamaré así) no debe exceder 10 páginas y debe ser autocontenido.

– El libro debe poder leerse en cualquier orden, es decir, no es necesario leer capítulos anteriores para entender o seguir el capítulo que se lee.

En otras palabras, el libro está pensado para leerse en el escusado. El título es, por supuesto, Física en el escusado.

Ahora, ¿cómo puedes participar? Sugiriendo temas, preguntas, problemas, etc. Básicamente estoy escribiendo el libro basándome en las preguntas más comunes que logrado recabar a lo largo de años de dar charlas de divulgación. He incorporado también algunas otras ideas, pero básicamente, hasta el momento, me he basado en eso. Así que si te interesa ayudarme y participar, mándame tus sugerencias.

Nota: estoy buscando la participación de todo tipo de personas. Si no tienes relación directa con la ciencia, aún mejor. Lo que busco son dudas e inquietudes que puedas tener y que te gustaría entender. No me importa el tema en específico, puede ser de cualquier cosa 😉


Neutrinos

agosto 21, 2012

En un par de semanas se llevará a cabo la Escuela (XV) de la División de Partículas y Campos de la Sociedad Mexicana de Física en la ciudad de Puebla. La escuela está orientada a estudiantes de doctorado y tiene el propósito de presentar algunos de los temas más relevantes en la actualidad. Aparte de las «lectures», que este año prometen estar muy buenas, habrá una serie de pláticas de revisión sobre diferentes temas. Tengo la fortuna de que me hayan invitado a dar una de estas charlas sobre el tema de la física de los neutrinos.

Me da gusto esta oportunidad por varias razones. Una de ellas es que los neutrinos me parecen las partículas más intresantes de todas, y por interesante me refiero a que a mi punto de vista son las partículas que más nos han hecho equivocarnos con la intuición. Desde su postulación en los década de los 30’s del siglo pasado, hasta hoy, los neutrinos siempre han estado involucrados en los avances de la física de partículas y siempre sorprendiendo. Para empezar, cuando se propusieron, nadie pensaba que pudieran observarse, es decir, detectarse y confirmar su existencia. La teoría sugería, por necesidad, que estas partículas atravesarían, en promedio, una barrera de plomo del ancho del sistema solar ¡sin interaccionar (y por lo tanto sin ser detectada)! Ésto desde luego no detuvo el ingenio ni la perseverancia de muchas personas que eventualmente lograron su detección.

Existen en la actualidad una docena de laboratorios en el mundo diseñados exclusivamente para el estudio de las propiedades de los neutrinos. En los últimos 10 años hemos sido capaces de obtener más información sobre esas partículas y – casi siempre – con un resultado que la mayoría no pensaba. Recuerdo por ejemplo cuando estaba trabajando en mi doctorado, aún no se sabía si los neutrinos tenían masa. Si la tenían, los neutrinos estaban forzados a participar en un fenómeno que se conoce como oscilación, y de hecho, lo que se buscaba era precisamente esas oscilaciones, que de confirmarse, implicarían que los neutrinos son masivos. Así pués, en esa época, los experimentos buscaban esas oscilaciones y existían dos regiones posibles (es decir,  no descartadas) en las que la oscilación podía existir, solo había que buscarlas ahí. De esas dos regiones había una que implicaba que los neutrinos oscilaban de manera muy parecida a los quarks, y otra en la que las oscilaciones eran muy distintas. Recuerdo que la mayoría esperábamos que finalmente, cuando se lograra hacer los experimentos, el resultado sería el de la región similar a los quarks. ¿porqué? Pues por pendejos, es decir, por la misma razón que alguna vez pensamos que la Tierra era el centro del sistema solar, y luego que no, que el Sol, y luego que no, etc.

Y pos no. Resultó, a la «sorpresa» de todos, que los neutrinos oscilan con propiedades distintas a los quarks. Y eso fue bueno.

Actualmente sabemos algunas cosas sobre los neutrinos pero desconocemos aún más. Por ejemplo: sabemos que son masivos (existen tres neutrinos distintos, en realidad sabemos con certeza que al menos dos son masivos) pero no sabemos cuánta masa tiene cada uno. Los neutrinos son fermiones, es decir, partículas con spin 1/2,. Pero no sabemos si son como todos los otros fermiones que conocemos (electrón, muón, tau, los quarks) que son de spin 1/2 y que tienen cada uno de ellos una antipartícula (y que les llamamos fermiones de Dirac, en honor a Dirac), o si los neutrinos son su propia antipartícula (a lo que llamamos fermion de Majorana, obviamente en honor a Majorana). Los neutrinos son las partículas (detectadas 😉 ) más abundantes en el universo, y sin embargo, su rol cosmológico tiene aún varios misterios e incógnitas. Por ejemplo, alunos resultados recientes indican que la participación de los neutrinos en la formación de la estructura (galaxias y cúmulos de galaxias) implica la existencia de cuatro, no de tres, neutrinos. Esto está en tensión con los resultados obtenidos en aceleradores (que requieren de tres) a menos que exista otro neutrino llamada «estéril» que no interaccione con prácticamente nada de lo que conocemos (no, por favor no vayan a pensar que se trata de un fantasma o de ángeles, no.). Existen teorías que postulan la existencia de bichos así y que además, porque así debe ser, hacen predicciones sobre fenómenos que sucederían si dichas bestias existieran. Y se les anda buscando.

En fin, que de ésto (y aquello) hablaré en Puebla y ya les contaré cómo me fue.


… y regresamos al aire

agosto 11, 2012

Después de una larga ausencia, en la que han sucedido cosas interesantes en el mundo de la ciencia, he podido (quizás) regresar. Espero poder reactivar este espacio con la esperanza de que se unan lectores y comentaristas.

Han sido dos las noticias científicas de mayor trascendencia en los últimos meses. Se trata desde luego del anuncio del CERN del descubrimiento de una nueva partícula consistente con el Higgs, y por otro lado, el reciente amartizaje de la sonda espacial Curiosity. Ambos eventos han generado noticia e interés en varios sectores y ambos eventos representan logros de la creatividad e ingenuidad de los humanos.

Sobre el resultado asociado al Higgs es relevante comentar que efectivamente se trata de uno de esos desubrimientos y avances que dejarán huella y del que se hablará durante mucho tiempo después de que existamos (los que vivimos en este momento). Es un resultado que reafirma, confirma y da consistencia a una serie de ideas y descubrimientos que repecuten a nivel muy profundo en el entendimiento del universo. Es un descubrimiento que marca época y del que hablarán los humanos mientras existan. Estoy planeando dar una serie de conferencias públicas sobre este resultado, ojalá les toque acompañarme en alguna. En cuanto tenga infomación precisa al respecto la publicaré aquí.

En el caso del curiosity se trata también de un evento significativo que retoma y mejora los primeros pasos de la exploración espacial en el sistema solar. Es un paso decisivo y firme en el camino de la exploración humana que en un futuro, si persiste, seguirá explorando y eventulamente llegará a salir de este planeta. Un planeta finito, pequeño, común y nada especial, es decir, un planeta más, como los demás. Hay quienes pueden sentir que estas palabras sugieren desprecio o indiferencia hacia «nuestro» planeta, y si, si insisten pueden intepretarlo así. Sin embargo, calificativos como desprecio o indiferencia, o cariño, o respeto, o etcétera, no me parecen aplicables. Es como decir que México es muy especial. Lo diría simplemente porque vivo aquí. Nací aquí, crecí aquí, y por lo general se tiende a pensar en que donde uno nace, crece, aprende, etc. es lo mejor, o si no, es muy bonito, o si no, lo quiero mucho, etc. Pero no, no es así. México es igual de común que cualquier otro lugar. Yo nací (y todos ustedes) en este planeta. Eso pudiera hacerme sentir un «cariño» especial hacia el planeta. Pero en realidad, este planeta se formó (y por lo tanto yo también) del mismo material del que se formaron los otros planetas de este sistema solar (al que seguramente debemos considerar como «bonito» y «especial» al compararlo con otros sitemas planetarios 😉 ) que a su vez fue material sobrante del que se utilizó cuando se formó nuestra estrella el sol (que desde luego habrá quienes piensen que es la estrella más linda de todas las estrellas). Ese sol, que nos llena de vida y de esperanza, y que es básicamente una planta termonuclear, en realidad se formó de material que resultó de las explosiones de estrellas más viejas. Como pueden ver, somos, incluido nuestro «maravilloso» planeta, extraordinariamente ordinarios, y eso es sensacional (y sensacional es un adjetivo mío, subjetivo y carente de significado, pero lo digo porque quiero). Es sensasional que material generado en los interiores de las estrellas y desparramado por el universo debido a enormes explosiones, luego se haya convertido en seres humanos que luego hayan entendido lo suficiente como para inventar televisores y hacer que la mayoría de ellos ya no hagan nada mas que ver esos televisores. Es magnífico!

Como diría Sagan (en mis palabras porque no me acuerdo la frase textual): es muy impresionante lo que el hidrógeno (el átomo más simple y abundante en el universo) puede hacer cuando le dan unos cuantos miles de millones de años: puede llegar a preguntarse, y quizás entender, su propio origen!